Turismo en Lago Cushillococha (Naturaleza)
El Lago Cushillococha se encuentra localizado dentro del departamento de Loreto, a pocos kilómetros del poblado de Caballococha. Este lago comprende una superficie total superior a las 100 hectáreas aunque, pese a su gran dimensión, y a las grandes posibilidades económicas de las que dotaría a los poblados aledaños, se ve en una situación bastante descuidada y con falta de manejo de sus potencialidades, por las autoridades correspondientes.
Entre las peculiaridades y recursos que tiene para ofrecer este Lago se encuentran la posibilidad de practicar el nado en sus amenas aguas, aunque se tiene que tener en cuenta, para esto, que las aguas de Cushillococha se caracterizan por presentar un color bastante oscuro y una profundidad que, en ciertos puntos puede alcanzar los ocho metros.
Las aguas de este hermoso lago, además, son idóneas para la pesca, si bien es cierto el recurso ictiológico de sus aguas se ha visto reducido en los últimos años, también es verdad que, con el debido cuidado este puede resurgir y en las aguas de Cushillococha podría volver a pescarse especies como el sábalo que es consumido por lo indígenas ahumado y también cocinado; otro pez es el boquichico y la yulilla (o yuliya), que se encuentra presente en todos los periodos del año.
Otros animales que se pueden encontrar en las aguas del Cushillococha son el bufeo gris conocido localmente como tucuxi y el bufeo colorado, conocido además como el delfín rosado y que, valga decir, es parte importante de la mitología local ya que, según se piensa, aquel es un ser encantado que tiene la cualidad de convertirse en un apuesto hombre (gringo) que enamora a las muchachas para que luego, prendadas de él se terminen arrojando a las aguas del lago que lo protege.
En el Lago Cushillococha además es posible navegar en pequeñas embarcaciones, asimismo, el hermoso entorno natural de este, lo vuelve ideal para realizar excursiones. En los alrededores de este lago, es posible también hallar comunidades nativas como es el caso de la de los Cushillococha, que pertenecen a la etnia Ticuna. Este grupo cultural lleva todavía una vida bastante alejada de la modernidad, y en su pueblo es posible observar sus diferentes trabajos artesanales, así como también adquirir, mediante el trueque, algunos de sus productos.